Después de la agonía sufrida en el Duatlon de Nuria, me he propuesto aprender a correr por el monte, sobretodo en las bajadas, donde el miedo a torcerme los tobillos y tropezar agarrota y entorpece mis movimientos, nunca antes me sentí tan patoso. Por lo menos dos sesiones semanales de monte y trialeras...
Este domingo, media maratón de Collserola.