Yo tengo mi carretera, es mia, es unica, de nadie mas, no la busques, no la encontraras mas que en mis pensamientos. Si quieres la puedo compartir contigo, enseñarte una parte del recorrido, tu tambien tienes una, quizas no lo sabes o quizas no la quieras compartir.
La mia empieza con una suave brisa que te acaricia , mientras avanzas lentamente. Hay mucha luz, casi molesta, hace calor. Mas adelante una ligera pendiente que va augmentando progresivamente te da la bienvenida, te despierta.
Poco a poco el camino se estrecha, la luz que hace un momento te cegaba, ahora se esconde entre los arboles y crea un tapiz de mil colores, las sombras te refrescan. El paisaje te sorprende, se abre, y te deja aparentemente solo, el sol de media tarde refleja tu sombra en el suelo, te acompaña tu respiracion que parece mezclarse con el sonido del viento, sudas, una sensacion calida recorre tu cuerpo, te entregas, eres suyo, un escalofrio, una vez arriba te paras y disfrutas del esfuerzo conseguido, oteas el horizonte para marcar tu ruta, tu siguiente destino y sin mirar atras emprendes de nuevo el camino, el ligero entumeciemiento de las piernas son un vago recuerdo.
Ahora desciendes rapido, tu mirada intenta ver mas alla mientras a tu alrededor todo pasa rapidamente hasta llegar otra vez al llano donde no alcanzas a ver el horizonte, el viento te acompaña, a veces a favor, otras en contra, los paisajes se suceden y cambian, la luz apunto de caer en el ocaso, refleja sus tonos mas rojizos, el dia se acaba, mañana mi carretera ya no estara en el mismo sitio, tendre que volver a buscarla, quien sabe donde.
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